En esta oportunidad y a pesar del mal tiempo, registramos 128 individuos pertenecientes a 15 especies diferentes.
A diferencia de lo observado en años anteriores, no se observan sectores de baja profundidad que serían favorables a las aves playeras migratorias que provienen del hemisferio norte.
Confiamos en que esta situación se pueda resolver y así devolverle el hábitat apropiado a estas especies singulares.
Biguá y pollona negra juvenil